Alguna vez has sentido que sos parte del mundo porque hablaste del tiempo?
Hola, me dice la Pelu. Tooooodos los dìas està baldeando la vereda de mis vecinos.
Ellos para esa hora están metidos en sus oficinas, tratando de que el sistema capitalista funcione.
A la Pelu le faltan dos dientes, pero, a quien le importa si su sonrisa está entera.
La cruzo esos dìas en que camino hasta el garaje de la Maru donde hacemos gimnasia con otras mujeres del barrio.
La problemática de los gimnasios caseros y de barrio es la ropa que llevan. Y los maridos.
El tema de esta semana es que uno de ellos come mucho dulce de leche.
LLega de trabajar y se acuesta a dormir la siesta. Se levanta cerca de las seis y se sienta con el tarro frente al televisor.
Este no es un trabajo antropológico chicos, es lo que me pasa esos días que voy al gimnasio. Y mientras trabajo el cuerpo para llegar groso al verano, escucho a esta mujer.
Y todas me miran como diciendo, ay, como quisiera que mi marido se preocupara por su cuerpo.
Yo sigo pensando, no en escribir esta historia. No. Pienso en que sigo siendo un negro cursi, pero ojo.
Hoy he sentido que soy parte del mundo.
Quiero empezar un curso de cocina vegetaria.
Se lo escuché a Gastón Pauls. Dice que es menos violento.
Porque no come carne.
De esa, claro.
miércoles, 3 de septiembre de 2008
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